"...Aprende a soñar viviendo, pero no vivas soñando... Sé como el ave que vuela, pero no olvides regresar a tierra..."



viernes, 27 de julio de 2012

capitulo 4

Hola. Lo primero queria decir que siento haber tardado tanto en subir este capitulo. Tube problemillas con el ordenador, y gracias a todos los que me leeis, sin vosotros no lo escribiría. Espero que os guste. xx


Capitulo 4: Frío gélido.

Todo desapareció de un momento a otro. Los muebles, el techo, las paredes, los objetos que yacían rotos en el suelo… todo se esfumó.

Entonces un aire helado les rozó la piel y ambos tiritaron de frío. Eric inspeccionó el paisaje. Estaban rodeados de arboles desnudos, sin hojas. El viento zarandeaba las ramas que al chocar producían un ruido parecido a un susurro. Miró hacía todos los lados. Únicamente se veían árboles y más arboles. Estaban en el claro de un bosque.

Amy se frotaba los brazos para generar calor. Con aquella gélida temperatura apenas podía moverse.

Entonces comenzaron a caer del cielo pequeños copos helados. Eric miró hacia arriba. Estaba nevando.

Hasta ese momento ninguno se había atrevido a hablar. En parte por el frío, aunque tampoco tenían palabras para describir lo que sentían. Lo que estaba ocurriendo era lo más raro que les había pasado en la vida.

-Tengo frío –tartamudeó  Amy tiritando.

Eric la miró. Tenía la cara blanca y los labios morados. La temperatura era excesivamente baja y no podría aguantar así mucho tiempo. Se quitó la chaqueta y cubrió a  Amy con ella.

-Tenemos que encontrar un lugar en el que refugiarnos. Esta nevando muy fuertemente –dijo Eric.

Comenzaron a andar entre los árboles. Cada vez nevaba con más fuerza y les costaba mucho caminar. Estaban a muchos grados bajo cero

-No puedo más –dijo Amy deteniéndose.

-Si puedes. Tienes que intentarlo.

Pero sus piernas no la respondían. Le dolía todo el cuerpo y no paraba de tiritar. El frío estaba pudiendo con ella.

Eric también estaba muy mal pero no quería rendirse. Miró hacia todos los lados. Fue de un lado para otro buscando un sendero, una cueva o cualquier cosa que pudiera salvarles la vida.

-Déjalo Eric, estamos perdidos –le dijo Amy cogiéndole del brazo para detenerle.

El suspiró. No podía acabar todo así.

-Si al menos supiera dónde estamos…

Entonces oyeron un ruido entre los arboles.  Amy se asustó muchísimo y aferró fuertemente la mano del muchacho.

-¿Qué a sido eso? –susurró.

Entonces oyeron pasos. Amy temblaba. Podía haber animales salvajes o cosas incluso peores. Ya se estaba imaginando siendo devorada por un oso o un lobo.  Aunque pensándolo bien, moriría de frío sino de todos modos.

Para sorpresa de ambos lo que apareció ante ellos fue una persona.  Amy suspiró. Parecía ser una chica aunque vestía tan abrigada que apenas se le veía la cara.

-¿Quiénes sois vosotros? –Dijo dirigiéndose a ellos, pero ninguno contestó -¿estáis bien?

Ellos dudaron un momento antes de contestar.

-Soy Eric y ella es Amy –dijo él tiritando.

-Yo soy Lilianne –les dijo mirándoles de arriba a abajo.

No llevaban abrigo, ni bufanda o gorro. Eric incluso iba en manga corta. Tenían la cara blanca y los labios morados. Estaban tiritando. ¿Cómo se les había ocurrido internarse el bosque a esas horas de la tarde y sin ropa de abrigo?

-¿Qué hacéis aquí? –les preguntó.

-Nos hemos… perdido –contestó Amy no muy segura. En realidad no sabía que hacían ellos allí.

Lilianne recapacitó un momento. Como no les llevara a algún lugar resguardado morirían por una hipotermia.

-Seguidme. Os llevaré al poblado.

Eric y Amy se miraron buscando la aprobación del otro para seguirla.

-¡Daos prisa! –les gritó Lilianne comenzando a andar.

Ellos la siguieron.

Ella caminaba delante de ellos a paso apresurado. Les costaba bastante seguirla. Empezaron a andar por un sendero estrecho. Los arboles estaban situados a ambos lados de ellos. La luz era escasa pero, más o menos, eran capaces de ver.

Amy miró al cielo. La luna llena les observaba desde lo alto. Las estrellas no podían verse a causa de las nubes pero ya había parado de nevar.

Entonces un lobo aulló en la lejanía. Amy agarró instintivamente la mano de Eric. Él la miró.

-No te preocupes –le dijo tranquilizándola –. Ha sonado muy lejos.

Esto no la tranquilizó del todo pero decidió no pensarlo. Mientras caminaba en silencio Eric estaba enfrascado en sus pensamientos.

Debía mantener la calma para tranquilizar a Amy. La verdad es que se hacía el valiente peo estaba asustado y no entendía nada. ¿Dónde estaban? ¿Qué hacían allí? ¿Quién era aquella chic extraña y a dónde les llevaba? Las preguntas se agolpaban en su cabeza sin que pudiera encontrar la respuesta.

-Ya estamos cerca –dijo Lilianne girándose. Ellos asintieron.



********



-Y ¿cómo os perdisteis en el bosque? –dijo Lilianne llevándose a la boca su tazón de chocolate caliente.

Amy la imitó mientras Eric hablaba.

Se encontraban sentados en torno a una mesa redonda que había en el centro del salón de la casa de Lilianne. La única luz que había era la producida por un candelabro que ella había colocado. Fuera no paraba de nevar.

La casa no era muy grande. Tenía dos plantas y un pequeño jardín en la parte delantera.

En la primera estaban la cocina y el salón que no estaban separados por ninguna pared. También había un pequeño aseo. En la segunda planta había tres habitaciones y un cuarto de baño.

-Bueno... lo importante no es como llegamos aquí sino dónde estamos –dijo Eric intentando salir del aprieto. Si le contaba la verdad nunca les creería.

-Estáis en Kalapa, ¿No lo sabíais?

-No, nunca oí hablar de este lugar –contesto él extrañado.

-Pues que raro. ¿Vosotros de dónde sois?

-De Lonefield –dijo Amy cogiendo una galleta del plato. Después de todo lo que había pasado tenía muchísimo hambre.


-Yo tampoco he oido hablar de ese lugar -contestó Lilianne


Entonces se hizo el silencio los tres se quedaron callados.

-Quiero que me digais como os perdisteis. ¿Que haciais en el bosque a esas horas y vestidos asi? -dijo Lilianne y después añadió -bueno mejor no. Ahora vamos a dormir y a descansar y ya hablaremos mañana. Amy tu puedes dormir en mi habitacion, que hay dos camas y tu Eric en la habitación de invitados.


Ellos asintieron.














2 comentarios:

  1. me encanta tu nvela! Está superguachi! Te mereces un premio!

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    1. Ay muchas gracias :), ya casi he terminado el proximo capitulo. cuando pueda lo subo

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